El valor de las emociones desagradables: ¿qué nos aportan?
En esta nueva publicación seguimos profundizando en el tema de las emociones, centrándonos en aquellas que consideramos desagradables.
Antes de adentrarnos en el tema, es crucial entender que las emociones no son ni buenas ni malas, simplemente existen. Como mencionamos en publicaciones anteriores, las emociones forman parte de nuestra experiencia humana, independientemente de lo que hagamos para evitarlas, y tienen un propósito.
El enfoque de la sociedad sobre las emociones
Cuando pensamos en emociones desagradables, es probable que nos vengan a la mente la ansiedad, la tristeza, el miedo, la culpa o la vergüenza. Estas emociones suelen generar un impulso automático de querer deshacernos de ellas rápidamente. Por ejemplo, la vergüenza puede aparecer en situaciones como hablar en público, acompañada del miedo a fallar. Muchas personas prefieren evitar este tipo de situaciones, mientras que otras deciden enfrentarlas pese a sentir vergüenza y miedo.
¿Es normal evitar emociones desagradables?
Por supuesto. La sociedad a menudo nos enseña que debemos evitar las emociones desagradables para lograr una vida tranquila y plena. Sin embargo, lo que no nos dicen es que estas emociones también tienen una función importante en nuestra historia evolutiva, tanto para los seres humanos como para los animales. Y no sólo eso, si no que aunque no nos demos cuenta, nos ayudan en nuestro día a día.
¿Qué nos aportan estas emociones en el día a día?
A continuación, te detallo algunas de las emociones desagradables más comunes y su función:
IRA
Nos motiva a mantenernos firmes, a luchar.
Resalta la importancia de defender lo nuestro, poner límites o levantarnos y luchar por lo que nos importa.
Comunica a otras personas que estamos defendiendo lo nuestro, lo que nos parece injusto o incorrecto, cuál es nuestro espacio.
CULPA
Nos motiva a reparar el daño que hemos hecho.
Resalta la importancia de cómo tratamos a los demás y la necesidad de reparar nuestros vínculos más importantes.
Nos ayuda a comunicar el mensaje de "He hecho algo mal y quiero repararlo".
VERGÜENZA
Nos motiva a dejar de comportarnos como dicen los demás y también a reparar daños.
Resalta la importancia de los demás y la forma en que los tratamos, lo que nos aporta pertenecer.
Ayuda a comunicar cuando hemos fallado o fracasado en algo.
TRISTEZA
Nos motiva a bajar el ritmo frenético que llevamos, a retirarnos y descansar.
Resalta lo importante que es el descanso y la recuperación tras una pérdida.
Nos ayuda a comunicar que hemos perdido algo o alguien importante.
¿Cómo podemos convivir con estas emociones?
Muchas veces nuestra primera reacción será evitar sentir emociones como la tristeza o la culpa. Esto es completamente natural. Sin embargo, es igualmente importante aprender a aceptar que, en algunas ocasiones, estas emociones estarán presentes. Permitirles espacio en nuestra vida, sin luchar constantemente contra ellas, nos ayudará a gestionar mejor nuestro bienestar emocional.
Abrazar nuestras emociones para mejorar nuestro bienestar
Las emociones desagradables, aunque incómodas, tienen un propósito y pueden ser herramientas poderosas para el crecimiento personal. Al aprender a aceptarlas y comprenderlas, damos un paso importante hacia una mayor autoaceptación y bienestar psicológico y emocional.
¿Necesitas ayuda psicológica en Almería o terapia online?
Si actualmente te sientes abrumado/a por inseguridades, problemas de autoestima o cualquier otra dificultad emocional, es fundamental que busques apoyo. Como psicólogo en Almería, estoy aquí para ofrecerte la ayuda que necesitas. Ya sea de forma presencial en Almería o a través de terapia online, no dudes en contactarme.